Cuando se firma un contrato, se crea un acuerdo jurídicamente vinculante que protege los intereses de cada parte. Si una de las partes incumple los términos del acuerdo, puede causar problemas considerables a la otra. Afortunadamente, la parte perjudicada puede elegir entre varios recursos legales para compensar cualquier pérdida. Uno de los recursos más comunes es la indemnización por daños y perjuicios, que se divide en cuatro categorías generales.
Indemnización por daños y perjuicios
Los daños compensatorios (o "daños reales") están específicamente destinados a compensar las pérdidas del demandante. Los demandantes pueden solicitar una indemnización compensatoria basándose en pruebas de las pérdidas, lesiones o daños que han sufrido. El objetivo legal es garantizar que la parte perjudicada quede "restablecida". Los daños compensatorios se presentan de dos formas. Daños esperados pretenden cubrir lo que el demandante esperaba recibir del contrato con cálculos basados en valores de mercado o en el propio contrato. Daños indirectos se refieren a daños indirectos que quedan fuera del ámbito del contrato, pero pueden dar cuenta de pérdidas que se produjeron directamente como consecuencia del incumplimiento.
Daños punitivos
Como su nombre indica, los daños punitivos sirven de castigo y disuasión de posibles incumplimientos en el futuro. Suelen concederse además de los daños compensatorios. Los daños punitivos son raros, pero pueden concederse a la parte infractora en respuesta a un comportamiento deliberado y perjudicial. También pueden encontrarse en casos que se solapan con el fraude o el derecho de responsabilidad civil.
Liquidación de daños y perjuicios
Los daños y perjuicios se incluyen a veces en el propio contrato, se determinan durante las negociaciones contractuales y se utilizan posteriormente como directriz en caso de incumplimiento. Estos daños liquidados facilitan la determinación de la indemnización monetaria correcta en casos en los que es difícil calcular la cantidad adecuada.
Daños nominales
Si un demandante puede demostrar el incumplimiento de un contrato pero no ha perdido dinero por ello, se le puede conceder una indemnización nominal. Los daños nominales implican una cantidad simbólica de dinero, como un dólar, utilizada para indicar que el demandante "ganó" la reclamación por incumplimiento de contrato. Estas indemnizaciones son poco frecuentes en los casos contractuales, que suelen implicar algún tipo de pérdida, pero también pueden aparecer en casos que se cruzan con el derecho de responsabilidad civil.
Si está implicado en una demanda por incumplimiento de contrato, probablemente tenga que hacer frente a daños compensatorios. Dicho esto, cada caso es diferente. Si usted es el demandante, es posible que tenga derecho a más de lo que espera, y si usted es el demandado, es posible que pueda acceder a una mejor defensa legal. Un abogado experto será capaz de decirlo basándose en las particularidades de su caso. Llame a Campbell Law Group para hacer uso de nuestra perspicaz y hábil asesoría legal. Nos aseguraremos de que obtenga el mejor resultado posible.